Una vez realizado el desarrollo que concluye no sólo con la viabilidad y estabilidad del producto y la compatibilidad con el envase, si no también con las muestras y su aprobación por parte del cliente se, aceptan también los envases primarios, secundarios y se entregan los artes finales del producto para poder preparar la fase industrial. En este punto se hace una prueba piloto para el cliente y para verificar que el paso a proceso industrial es viable y los costes serán los presupuestados. Total Transparencia.